Hace poco terminé de leer "Confesión" de León Tolstoy. Aunque no es una de sus novelas más importantes, a través de este ensayo el autor relata, con fines altruistas, sus inquietudes como escritor, los períodos en que estuvo atormentado por dudas existenciales que durante años lo hicieron considerar suicidarse, y el punto crítico en su vida a partir del cual puede decirse que su vida cambió radicalmente.

Se podría decir hay un Tolstoy antes y otro después de su crisis espiritual. A partir de aquí cambió radicalmente su forma de relacionarse con el mundo y de vivir, hasta el punto de llegar a criticar el pasado literario que lo llevó a la fama.

Creo que este libro corto es un relato muy inspirador de alguien especialmente iluminado que alcanzó una fe tan firme y a la vez tan abierta, tolerante e integradora, que le llevó a renunciar a su estilo de vida aristocrático para dedicarse por vocación (aunque su esposa se negó a deshacerse de sus bienes) a vivir entre las personas sencillas de las aldeas, cultivando en su casa, trabajando como zapatero y además como maestro para los hijos de los aldeanos.

En cuanto Tolstoy recuperó la fe, reconoció en la religión la posibilidad de unión con todas las personas que compartían su presente, así como con sus antepasados, y con la humanidad entera, a través de los rituales religiosos, la oración y las tradiciones de la fe. Él buscaba hermanarse con la humanidad a través de algo más allá del plano físico, y por eso, durante algunos años luego de su crisis, retomó los rituales religiosos que eran comunes en su época y en su país, a pesar de que encontraba que varios de ellos eran absurdos o estaban fundados en mera superstición o arbitrariedad. Luego, al observar cómo cada religión se consideraba dueña de la verdad y veía a los demás seres humanos que profesaban diferentes credos como "seguidores del diablo" o "gente engañada por el diablo", por quienes la Iglesia no podía hacer más que "rezar por su alma"; además de descubrir que la Iglesia Ortodoxa también tomaba partido en las guerras y rezaba para que unos triunfaran y que otros murieran, finalmente Tolstoy se horrorizó de estas cosas y se apartó definitivamente de la Iglesia, para empezar un nuevo movimiento que varios llamaron Tolstoianismo, y que entre otros inspiró a Ghandi para su revolución pacífica.

Aparte de su lado espiritual como hombre altruista y de fe, en el aspecto puramente literario es considerado el mayor y principal exponente de la corriente literaria llamada "realismo".